Andrew McCarthy: "El escuadrón" contra Trump - La izquierda progresista aún no ha descubierto cómo vencer al presidente

El presidente puede ser muy entretenido, pero no presto mucha atención a los mítines políticos, incluidos sus famosos mítines estridentes.

Para los fieles, los mítines son espectáculos divertidos, como los conciertos de rock o los partidos de béisbol. No creo que puedan tomarse demasiado en serio, salvo quizá como indicador del apoyo al presidente. No en lugar de las encuestas, sino conjuntamente. Y con un sano escepticismo: Las encuestas tienen un historial de infravaloración de los partidarios de Trump, pero el ardor de la base de Trump que se muestra en los mítines no debe confundirse con el entusiasmo nacional por la presidencia de Trump, aunque puede indicar una mayor apertura a ella, especialmente a la luz de la alternativa cada vez más radical.

Lo que nos lleva al mitin de Trump del miércoles por la noche en Greenville, Carolina del Norte, y a la multitud engatusada de seguidores de Trump que coreaban "¡Que vuelva!".

FRED FLEITZ: NO IGNORES A LOS REPS. OMAR Y TLAIB Y SU ODIOSA RETÓRICA ANTISEMITA Y ANTIISRAELÍ

Se refería a Ilhan Omar, estadounidense naturalizada de Somalia, radical en la concurrida confluencia entre islamistas e izquierdistas, y congresista por el quinto distrito de Minnesota, la zona azul de las Ciudades Gemelas, repleta de millennials e inmigrantes somalíes.

HAZ CLIC AQUÍ PARA OBTENER LA APLICACIÓN FOX NEWS

Toda buena demagogia populista necesita un villano. El presidente Trump apenas tiene el mercado acaparado en esto. Tanto Barack Obama como Hillary Clinton estudiaron organización comunitaria alinskyana. Al organizador, autodenominado renegado contra el establishment, se le instruye para que evite las abstracciones a la hora de elegir un objetivo opositor. Hay que hacerlo personal, polarizar al adversario en términos descarnados. La personalidad de Trump consiste en devolver el golpe más fuerte de lo que le golpean. No es de extrañar, pues, que sea un practicante de este arte demagógico, ya que también es el objetivo nº 1 de la izquierda.

HAZ CLIC AQUÍ PARA CONTINUAR LEYENDO LA COLUMNA DE ANDREW McCARTHY EN THE NATIONAL REVIEW.

Carga más..