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Estimado Presidente electo Donald Trump,

Me llamo Ofri Bibas Levy. Aunque puede que no me conozcas personalmente, seguro que has oído hablar de mi hermano Yarden Bibas, de su esposa Shiri, y de Ariel y Kfir, sus dos hijos pelirrojos que han cautivado los corazones de todo el mundo. El Primer Ministro Benjamin Netanyahu te presentó una foto del joven Ariel sosteniendo su dibujo de Batman, con las palabras "Estoy volando y salvando a gente que está atrapada en un agujero", igual que él y tantos otros siguen atrapados hoy.

Estos niños y sus padres llevaban una vida familiar corriente -la ajetreada rutina de unos padres con dos hijos pequeños- hasta quenos los arrebataron hace más de un año. Todavía hay esperanza: los servicios de inteligencia confirman que más de la MITAD de los 100 rehenes que siguen cautivos están vivos, pero su tiempo se agota rápidamente. Los miembros de mi familia están entre los que aún podemos salvar, pero sólo si actuamos ahora.

La familia Bibas, de izquierda a derecha: Yarden, Ariel, Shiri y Kfir

La familia Bibas, de izquierda a derecha: Yarden, Ariel, Shiri y Kfir (Ofri Bibas Levy)

El 7 de octubre de 2023, fueron arrancados violentamente de su vida cotidiana. Yarden, su padre, tomó la desgarradora decisión de separarse de su familia en un intento desesperado de protegerlos, pero a pesar de sus esfuerzos, sus hijos Ariel y Kfir fueron secuestrados junto con su madre, Shiri. Las imágenes de su secuestro -que mostraban a los aterrorizados niños en brazos de su madre- se convirtieron en un inquietante símbolo de la crueldad de Hamás. Dos meses después, la brutalidad de Hamás alcanzó nuevas cotas cuando hizo público un vídeo de guerra psicológica en el que se les veía atormentando a Yarden en cautividad, diciéndole cruelmente que su mujer y sus hijos estaban muertos, intentando quebrar su espíritu.

Recientemente, el mundo celebró el Día Internacional de los Derechos del Niño, una conmemoración iniciada por primera vez por el reverendo Charles Leonard, de la Iglesia Universal de Chelsea, Massachusetts, hace 168 años. En este día tan significativo, las Naciones Unidas adoptaron la Declaración de los Derechos del Niño, una poderosa convención que sitúa el bienestar de los niños por encima de cualquier otra consideración. Esta declaración nos obliga a todos a proteger a los niños de la tortura, la explotación, el abuso y el abandono.

Kfir Bibas, que sigue secuestrado en Gaza, sonríe en una foto con su tía.

Kfir Bibas, izquierda, y Ofri Bibas Levy, derecha, sonríen juntos bajo un árbol.

¿Dónde está este compromiso con estos niños tan pequeños? Nuestro pequeño Ariel, tímido y alegre, se vio obligado a mark cumplir cinco años en los túneles de Hamás, bajo la atenta mirada de terroristas asesinos, lejos de la familia y los amigos que le quieren. Llevamos más de un año atormentados por no saber las condiciones que soportan él y su hermanito Kfir. Secuestrado cuando sólo tenía nueve meses, Kfir ya ha pasado su primer cumpleaños en cautiverio y pronto mark cumplirá dos años en enero en manos terroristas, si no actuamos con la suficiente rapidez. El tiempo es esencial: aunque sabemos que muchos rehenes siguen vivos, sus condiciones se deterioran cada día que pasa. Estos hombres, mujeres y niños inocentes luchan por sobrevivir en condiciones horribles, por lo que cada momento de retraso no sólo es doloroso, sino imperdonable.

Kfir Bibas

Kfir Bibas, a los nueve meses. (Cortesía: Bring Them Home Now)

Me dirijo a ti, Sr. Trump, con desesperación y súplica: Ayúdanos donde todos hemos fracasado. Utilice su enfoque único, intransigente y creativo para devolvernos a Kfir, Ariel, Shiri y Yarden. Devolver a los 100 rehenes de Gaza no sólo es moral y éticamente correcto: es nuestra obligación humana. 

Después de tantos meses agonizantes, por fin se habla de un acuerdo. Debemos aprovechar esta oportunidad para conseguir la liberación de todos los rehenes retenidos por Hamás -hombres, mujeres, ancianos y niños- y reunirlos con sus familias. El tiempo es esencial para impulsar este acuerdo, y la devolución de los rehenes es un requisito previo para la estabilidad en Oriente Próximo. No habrá paz hasta que los traigamos a casa: a los vivos -que constituyen más de la mitad de los secuestrados- para su rehabilitación, y a los muertos para darles adecuada sepultura.

Agradecemos los esfuerzos de la administración estadounidense y de otros durante el último año, y te pedimos, presidente electo Trump, que nos prestes tu voz y tu mano para que Kfir y Ariel puedan celebrar su próximo cumpleaños en casa, con nosotros y con sus amigos. Es su derecho y nuestro deber. Aún pueden salvarse muchas vidas preciosas.