Rechazada por poco la prohibición europea de la pornografía

(AP)

Aunque ha existido desde la prehistoria, la gente no está unida en absoluto sobre si la pornografía es, en general, algo bueno o malo. Los economistas la consideran una próspera industria del entretenimiento y otros la ven como una amenaza moral, pero la Unión Europea estuvo a punto de aprobar una legislación que podría haber puesto fin a la pornografía por completo.

El Parlamento Europeo (PE) votó recientemente un informe que pretende acabar con la representación de estereotipos de género perjudiciales. Este tipo de legislación no es vinculante, sino que sugiere medidas que el gobierno puede tomar para abordar un determinado asunto. Un diputado emprendedor intentó colar en el procedimiento una recomendación para prohibir toda la pornografía.

"Eliminar los estereotipos de género en la UE", se presentó por primera vez ante el PE en diciembre de 2012, según CNET. Esta legislación pretendía abordar cuestiones de igualdad de género, especialmente en términos de representación en la cultura popular y la conciencia cotidiana.

El informe afirmaba, no sin razón, que las mujeres en general lo tenían peor que sus homólogos masculinos en los medios de comunicación, la educación y la mano de obra. No apareció nada demasiado fuera de lo normal hasta la Acción nº 17 de la UE, que exigía que el PE se pronunciara definitivamente sobre una propuesta de 1997 "[que pedía] la prohibición de todas las formas de pornografía en los medios de comunicación".

El PE (del que dos tercios son hombres) decidió que los derechos de la mujer son una causa tan buena como cualquier otra que apoyar, y aprobó el informe, rechazando la cláusula de prohibición de la pornografía. Por ahora, los europeos solitarios de todo tipo pueden seguir consumiendo porno, y los artistas de proporciones inusuales pueden seguir produciéndolo. [Ver también: Las 10 peores leyes de Internet del mundo].

Aunque la cuestión vuelva a plantearse, votar "sí" a una prohibición europea de la pornografía podría equivaler a un suicidio político. Cada país europeo tiene una legislación diferente en materia de pornografía, y una prohibición general podría perjudicar a muchos países miembros.

Si la UE prohibiera la pornografía en el futuro, sería casi imposible hacerla cumplir. En general, los europeos pueden acceder a lo que quieran por Internet, y si la pornografía se convirtiera en ilegal en los estantes de revistas y DVD, es probable que las ventas por Internet se dispararan.

Además, la pornografía europea aporta más de 1.000 millones de dólares anuales en ingresos fiscales. Sexo y dinero son una combinación difícil de rechazar.