Trucos para viajar con tu pareja

Unas vacaciones con tu pareja pueden ser una aventura romántica y significativa que, en última instancia, os unirá más al vivir experiencias increíbles.

Sin embargo, también sabemos que salir de viaje juntos puede ser un poco estresante cuando no se está bien preparado. Desde el trabajo que conlleva planificar el viaje, hasta la delicadeza de ajustarse al presupuesto, no es de extrañar que muchas parejas se encuentren fácilmente discutiendo durante el proceso.

Pero todo eso puede evitarse. Con unos pocos consejos, la planificación puede convertirse en un proceso fluido, sencillo y que ahorre dinero, los viajes juntos pueden ser más relajantes y tus "viajes de relación" pueden tener aún más éxito.

Acuerda tus normas de viaje con antelación para calcular tu presupuesto real.

Es importante discutir las normas de viaje, incluso en el caso de parejas de viaje experimentadas con personalidades viajeras similares. Las parejas que conviven pacíficamente suelen tener hábitos de viaje completamente distintos, así que hablad de vuestras manías antes de reservar el viaje. ¿Tu idea de una "escapada" tiene lugar en la playa o en una gran ciudad? ¿Os gusta ir de albergue en albergue o alojaros sólo en hoteles de 5 estrellas? Ponte de acuerdo con tu pareja sobre el tipo de escapada y el alojamiento que ambos queréis para determinar un presupuesto realista y ayudar a racionalizar la planificación, y luego empieza a hacer una lluvia de ideas sobre destinos. Recuerda que puedes tener una experiencia similar en muchos lugares distintos, así que no creas que tienes que visitar el destino de playa más caro y popular para vivir una escapada playera extraordinaria. Después de elegir un destino, asegúrate de elaborar un plan aproximado de actividades. Es mejor encontrar un compromiso sobre las cosas que hacer en casa que enterarse durante las vacaciones de que tu pareja prefiere tirarse en tirolina que ir a la ópera.

Más sobre esto...

Ten un plan para alimentarte y dormir lo suficiente, o probablemente no lo harás.

Los viajes tienden a alterar nuestros patrones de alimentación y sueño, y las personas cansadas y hambrientas tienden a ser compañeros de viaje malhumorados. El riesgo es aún mayor porque la mayoría de nosotros intentamos meter todo lo que podemos en nuestros preciados días de vacaciones. Estar constantemente de viaje, hacer turismo todo el día y desconocer el entorno puede llevarnos a saltarnos comidas sin darnos cuenta de que tenemos hambre. Es una buena idea meter tentempiés en una mochila antes de salir a hacer turismo o parar en una tienda de comestibles cerca del hotel para comprar pequeños bocados. Te serán muy útiles cuando hayas abandonado el itinerario en favor de la exploración y no sepas cuándo verás tu próxima gran comida. En cuanto al sueño, intenta adaptarte poco a poco a la diferencia horaria de tu destino antes de salir de viaje, controla el sueño durante el vuelo y, si aterrizas de día, intenta no dormirte inmediatamente al llegar. La luz del día puede ayudar a reajustar tu reloj interno, así que da un paseo al sol o nada más levantarte por la mañana para intentar adaptarte, y después intenta dormir de 6 a 8 horas por la noche para mantenerte en forma.

Planifica un poco de tiempo de amortiguación... para todo.

Las prisas conducen a una cosa: al estrés. Y el estrés puede causar tensiones incluso en las relaciones más sólidas. Daos tiempo suficiente para todo, sobre todo para los puntos de control importantes, como aeropuertos, estaciones de tren y lugares donde alquilar un coche. Si os dais un margen, aliviaréis las presiones del viaje, os permitiréis centraros el uno en el otro y tal vez incluso os dejéis tiempo suficiente para tomar un cóctel o un postre antes de embarcar. El tiempo de margen también puede ayudar a ahorrar dinero. Perder una reserva puede salir muy caro. Cuando vueles, haz la facturación por Internet lo antes posible (idealmente la noche anterior) para evitar este paso en el aeropuerto y llega al aeropuerto al menos una hora antes para tener tiempo suficiente para pasar el control de seguridad. Aprovecha tu dispositivo móvil y suscríbete a las alertas en línea del sitio web de tu compañía aérea o descárgate una aplicación de seguimiento de vuelos para que te avisen si se produce algún cambio en los vuelos y puedas ajustar tus planes en consecuencia.

La planificación financiera parece aburrida, pero el resultado final es más divertido.

Investiga siempre antes de comprar tu viaje. Gastar menos en el alojamiento de tu viaje no sólo te hace sentir seguro de que has conseguido una buena oferta vacacional, sino que significa que tienes más dinero para gastar en comidas, actividades o compras. Hay un montón de recursos online -Hotwire es uno de ellos- que ofrecen tarifas increíbles incluso en el último minuto. Una forma de mantener tu viaje dentro del presupuesto es redondear tus números y elegir un itinerario que ambos podáis pagar cómodamente. Si viajas al extranjero, consulta las condiciones internacionales de tu banco y proveedor de tarjetas de crédito y avísales de que vas a visitar un país extranjero. Si tienes en cuenta las comisiones internacionales, puede resultar más barato sacar dinero de un cajero automático extranjero que cambiar moneda en ventanilla o utilizar tu tarjeta de crédito. Alerta también a tu proveedor de telefonía móvil; pueden tener planes o servicios especiales que reduzcan las tarifas de itinerancia internacional, y podrán decirte qué funciones desactivar en tu teléfono (por ejemplo, datos, correo electrónico) para evitar volver a casa con una factura de móvil por las nubes.

Aprovecha las ventajas de viajar en pareja.

Al registrarte, di que es tu luna de miel o tu aniversario (siempre que no crees estrés sacando esos temas, claro) o simplemente pide mejoras. Nunca se sabe cuándo podrás conseguir regalos, como una habitación más grande con vistas o una botella de champán de bienvenida, con sólo pedirlo. A la mayoría de la gente le da vergüenza pedirlo, pero a los buenos hoteles les encanta tener un motivo para hacer que los huéspedes se sientan especiales, lo que aumenta la probabilidad de que se conviertan en clientes fieles. En el peor de los casos, en recepción te dirán que hay que pagar una mejora, pero puede merecer la pena si consigues el tipo de habitación que hará que tu viaje sea inolvidable.

Estos consejos y trucos pueden ser útiles en cualquier etapa, desde la planificación del viaje hasta el regreso. Tener en cuenta algunos de estos puntos puede significar la diferencia entre unas vacaciones teñidas por algunos momentos duros y un viaje inolvidable que cimente vuestro vínculo durante años.