Familias divididas, el legado del aumento de la inmigración cubana a EE.UU.

En esta foto del 23 de septiembre de 2015, Olea Lastre, a la izquierda, cuyo marido e hijo huyeron a Estados Unidos, posa para una foto con su hija Olia Cárdenas y una amiga de la familia delante de su casa en el barrio de Porvenir de Camagüey, Cuba. En febrero, Olea y las demás mujeres del barrio cuyos maridos estaban en Estados Unidos contrataron a una profesora para que fuera a su casa dos veces por semana y les enseñara inglés por 5 dólares al mes. Aprendieron saludos y frases que les ayudarían a buscar trabajo. Aun así, hay días en que Lastre teme no volver a ver a su hijo ni a su marido. (AP Photo/Christine Armario)

En esta foto del 23 de septiembre de 2015, Yainis Souto, de 25 años, posa para un retrato sosteniendo una foto que le hicieron con su entonces novio, José Fuentes Lastre, antes de que huyera de Cuba con su padrastro en una balsa en Camagüey, Cuba. Tras la noticia de que Lastre y otros ocho hombres habían desembarcado en Florida, decenas de otros jóvenes de ambos sexos del barrio familiar de Camagüey empezaron a construir balsas, acelerando aún más la división de familias y parejas. Souto y Lastre rompieron mientras intentaban mantener una relación a distancia. (AP Photo/Christine Armario)

En esta foto del 23 de septiembre de 2015, calcomanías de Mickey y Minnie Mouse decoran un refrigerador en la casa de Yainis Souto en Camagüey, Cuba. Souto compartía la vivienda con su entonces novio José Fuentes Lastre antes de que éste huyera de Cuba en una balsa hacia Estados Unidos con su padrastro Antonio el año pasado. Souto y Lastre rompieron mientras intentaban mantener una relación a distancia. (AP Photo/Christine Armario)

Esta foto del 23 de septiembre de 2015 muestra el retrato de Yainis Souto cuando tenía 15 años, así como una foto de ella con su entonces novio José Fuentes Lastre, dentro de su casa en Camagüey, Cuba. Souto y Lastre rompieron mientras intentaban mantener una relación a distancia, con Lastre en EE.UU. y Souto en su barrio infantil de Porvenir. (AP Photo/Christine Armario)

Esta foto del 23 de septiembre de 2015 muestra la sala de estar dentro de la casa de los Cárdenas en Camagüey, Cuba. Los dos hombres Cárdenas, Antonio y su hijastro José Fuentes Lastre, forman parte de una oleada migratoria nunca vista en al menos una década. Los que no tienen dinero ni familiares que les ayuden, como los hombres de Cárdenas, huyen en balsas. La oleada ha devastado barrios cubanos, exacerbado el éxodo de trabajadores y profesionales del país y acelerado la división de las familias. (AP Photo/Christine Armario)

En esta foto del 23 de septiembre de 2015, Olea Lastre, peluquera, muestra en su teléfono móvil una foto de su marido Antonio Cárdenas con su hijo José Fuentes Lastre, tomada en Estados Unidos después de que sobrevivieran 10 días en el mar en una balsa en el estrecho de Florida, en Camagüey, Cuba. Los hombres huyeron el año pasado y ahora viven en Portland, Oregón, donde fueron reasentados por una organización benéfica y su marido trabaja en una fábrica de envasado de carne. (AP Photo/Christine Armario)