El ex líder cubano Fidel Castro muere a los 90 años

El líder cubano Fidel Castro, el revolucionario comunista barbudo y fumador de puros que enfureció a Estados Unidos, inspiró lealtad y aversión a sus compatriotas y mantuvo un férreo control de la política cubana durante casi 50 años, murió el viernes. Tenía 90 años.

Horas después de su muerte, el presidente Obama emitió una declaración en la que decía que en "este momento del fallecimiento de Fidel Castro, tendemos una mano de amistad al pueblo cubano."

"Sabemos que este momento llena a los cubanos -en Cuba y en Estados Unidos- de poderosas emociones, recordando las innumerables formas en que Fidel Castro alteró el curso de las vidas individuales, de las familias y de la nación cubana", dijo Obama. "La historia registrará y juzgará el enorme impacto de esta figura singular en las personas y el mundo que le rodean".

Castro, el único líder que conoció la mayoría de los cubanos, sobrevivió a 11 presidentes estadounidenses desde que tomó el poder por primera vez en 1959.

La salud de Castro había empeorado en los últimos años, pero no lo suficiente como para impedirle vomitar sus desplantes antiamericanos, casi hasta el final.

En octubre de 2014, Castro reprodujo en los medios de comunicación estatales un editorial del New York Times en el que se defendía el fin del embargo estadounidense a Cuba. El editorial se publicó casi literalmente, omitiendo una línea sobre la liberación de presos políticos en Cuba.

Dos años antes, escribió un artículo de opinión para un medio de comunicación estatal en el que calificaba las primarias presidenciales republicanas de "la mayor competición de idiotez e ignorancia" jamás vista.

Y para demostrar hasta qué punto su volátil presencia perduraba en la política estadounidense, a pesar de haber entregado oficialmente el poder a su hermano Raúl en 2008, Castro fue objeto de una pregunta durante un debate de candidatos republicanos en Tampa, Florida, el mismo mes en que se publicó el artículo.

Cuando preguntaron a Mitt Romney qué sería lo primero que haría como presidente si se enterara de que Castro había muerto, respondió: "Bueno, en primer lugar, dar gracias al cielo de que Fidel Castro ha vuelto con su creador y será enviado a otra tierra".

Cuando le tocó responder, Newt Gingrich dijo: "No creo que Fidel vaya a encontrarse con su creador. Creo que irá a otro lugar".

El abogado, revolucionario y líder político que desencadenó reacciones tan viscerales nació el 13 de agosto de 1926 fuera del matrimonio, hijo del propietario de una plantación azucarera cubana y de una sirvienta de su casa. (Con el tiempo se casaron.) No fue reconocido formalmente por su padre hasta los 17 años, cuando le cambiaron el apellido materno, Ruz, por el de Castro.

Aunque pasó la mayor parte de su vida despotricando contra el capitalismo y los ricos, Castro disfrutó de una infancia rica y privilegiada.

Asistió a internados jesuitas y desarrolló afición por los deportes, lanzando para el equipo de béisbol de El Colegio de Belén. Asistió a la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana, donde se unió a grupos centrados en el nacionalismo y el socialismo cubanos.

Tras graduarse y convertido en revolucionario, se alzó en armas contra el gobierno del presidente Fulgencio Batista, dirigiendo un fallido ataque en 1953 contra un cuartel militar con la esperanza de desencadenar una revuelta popular.

En lugar de ello, fue capturado y en su juicio, donde dirigió su propia defensa, predijo célebremente que "la historia me absolverá".

Tras pasar un tiempo en prisión, Castro se exilió en México, donde conoció a Ernesto "Che" Guevara, que se convirtió en su confidente.

Castro estableció otra fuerza guerrillera y, tras varios años de lucha, acabó derrotando a Batista en 1959, haciéndose con el control de Cuba a la edad de 32 años.

Tras jurar el cargo de primer ministro, Castro inició una serie de reformas, muchas de ellas destinadas a acabar con el poder económico estadounidense en la isla. Las relaciones entre ambos países se deterioraron y, cuando Castro visitó Estados Unidos ese mismo año, el presidente Dwight Eisenhower se negó a reunirse con él.

Al mismo tiempo, el gobierno de Castro empezó a establecer relaciones con la Unión Soviética. En abril de 1961, Castro declaró formalmente que Cuba era un Estado socialista, pocos días antes de la desastrosa invasión de Bahía de Cochinos, en la que 1.400 exiliados cubanos entrenados por la CIA intentaron sin éxito invadir y derrocar a su gobierno.

Castro intensificó las relaciones con la Unión Soviética y, en 1962, aviones de reconocimiento estadounidenses descubrieron misiles soviéticos de camino a emplazamientos cubanos, lo que precipitó un tenso enfrentamiento entre el presidente John F. Kennedy y el primer ministro soviético Nikita Jruschov.

Pero en la década de 1980, Rusia dejó de aceptar el azúcar cubano, provocando una privación económica generalizada que hizo que miles de cubanos intentaran huir a Estados Unidos por mar.

Castro hablaba a menudo con resentimiento y disgusto de los cubanos que abandonaron la isla a causa de su gobierno, sobre todo de los que se exiliaron en Estados Unidos.

Llamó "guzanos" a los exiliados cubanos y se quejó de la mafia de Miami, que siempre buscó su destitución.

Los exiliados cubanos respondieron con igual desdén, y muchos formaron organizaciones centradas exclusivamente en sacar a Castro del poder.

Los rumores sobre su muerte corrieron por las comunidades cubanas muchas veces a lo largo de las décadas.
En un discurso pronunciado en 1988, Castro dijo: "Creo que ostento el dudoso récord de haber sido objeto de más intentos de asesinato que ningún político, en ningún país, en ninguna época".

"El día que me muera, nadie lo creerá".

Castro fue primer ministro hasta 1976, cuando se convirtió en presidente, cargo que ocupó hasta 2008, cuando Fidel, enfermo, traspasó el poder a su hermano menor Raúl.

Siguió siendo Primer Secretario del Partido Comunista hasta abril de 2011.

E incluso cuando oficialmente dejó el cargo, siguió siendo la figura más conocida de Cuba.

"Los hombres no forjan el destino", dijo una vez. "El destino produce al hombre para la hora".

Por el camino fue un enemigo principal de Estados Unidos y hubo informes de que la CIA intentó derrocarlo de diversas formas, aunque algunas sugerencias -como la explosión de un puro- parecían rozar lo absurdo.

La vida personal de Castro era complicada y privada. Se creía que tenía un hijo de un primer matrimonio, una hija ilegítima de otra relación, cinco hijos de un segundo matrimonio y otro hijo de madre desconocida.