Los niños soldado de Yemen afrontan un largo camino tras sufrir abusos sexuales y físicos

Dos docenas de niños están sentados tranquilamente en una pequeña aula, con sus uniformes impecables y la bandera de su país colgada del cuello. Las paredes están decoradas con dibujos de colores, pero en el ambiente se respira una profunda oscuridad: Estos chicos han quedado muy traumatizados por la actual guerra civil de Yemen, y casi todos los alumnos fueron reclutados a la fuerza como niños soldado.

Se cree que al menos la mitad de los niños soldado -que parecen mucho más pequeños y jóvenes que sus 12 o 15 años- han sido víctimas de agresiones sexuales mientras estaban bajo el control de la milicia, afirman los expertos.

"Lo más difícil es ayudar a los que vienen de los campos de batalla habiendo sufrido abusos sexuales. Lleva mucho tiempo ayudarles", dijo a Fox News el Dr. Mahyob Almechlatky, psiquiatra del Proyecto de Rehabilitación de Niños Reclutados y Afectados por la Guerra en Yemen, en Ma'rib (Yemen). "Lamentablemente, es muy común. Una gran cantidad de los estudiantes se han enfrentado a esto y estamos intentando quitarles la vergüenza."

El centro de rehabilitación, con una plantilla de 25 profesionales sanitarios, intenta ahora curar esas cicatrices silenciosas. Financiado por el Centro de Ayuda Humanitaria y Socorro Rey Salman (KS), el proyecto pretende rehabilitar a los niños y reintegrarlos en la sociedad y en la escuela.

El enfoque intensivo para "sacar la energía negativa" incluye desde manualidades hasta deportes, asesoramiento e hipnosis.

"Los abusos sexuales son muy frecuentes, quizá entre el 50 y el 60 por ciento", dijo Mohammad Mobarak, director del proyecto de la escuela y del Centro de Ayuda del KS. "Este conflicto ha afectado a demasiadas vidas jóvenes, y sólo queremos darles la oportunidad de volver a ser niños. Ellos no eligieron formar parte de esto".

Esta clase, a tres días de su graduación, pronto se añadirá a la lista de unos 180 chicos que ya han pasado por el programa de rehabilitación en régimen de internado, de un mes de duración, desde su inicio en agosto del año pasado.

Si era demasiado lento, me ganaban'.

- Khalil, ex niño soldado en Yemen

Y cada niño tiene su propia historia desgarradora, cada una más trágica que la otra.

Khalil, de 14 años, recuerda que estaba jugando fuera de su casa de Amran con un amigo cuando un hombre pasó en coche y se ofreció a llevarles. Acabaron en una base de la milicia Houthi. Durante tres meses, Khalil recibió órdenes de realizar diversas tareas militares, como llenar sacos de arena.

"Si era demasiado lento", susurró Khalil, con la cara ahora torcida y la boca aún hinchada, "me pegaban".

A Omar Abdullah, de 14 años, también lo sacaron el año pasado de un parque infantil situado frente a su mezquita local de Amran y durante dos meses lo maltrataron. Si se negaba a cumplir las órdenes del comandante, lo golpeaban con el cañón de un AK-47 y lo mataban de hambre hasta la sumisión.

Hace aproximadamente un año, uno de los "supervisores houthis" se ofreció a sacar a Omar del centro militar a cambio del equivalente a 100 dólares.

"Me pusieron entre los cadáveres, los combatientes muertos, y durante diez horas no pude moverme", recordó Omar, dando cuerpo a aquel temible viaje con vívidos detalles. "Luego, cuando llegamos, el supervisor dijo que volaría mi casa si no le daba el dinero. Mi familia no tenía dinero, así que supliqué a mi vecino, que me ayudó".

Un edificio destruido en Adén, Yemen, muestra los estragos de la guerra. (The Associated Press)

Y a Ahmed, de 15 años, que todavía habla entrecortadamente mientras sus ojos miran a lo lejos, también le ofrecieron llevarle a casa mientras pastoreaba sus cabras en las afueras de Ma'rib. Antes de que pudiera intervenir, le arrojaron dentro y comenzó su infierno de cuatro meses con una milicia Houthi.

"Nos dieron información equivocada; nos dijeron que luchábamos contra el ISIS", dijo Ahmed. "Pero cuando estábamos luchando, mataron a mi amigo, que era un niño como yo, a mi lado, y me entró el pánico".

Una unidad del ejército local adscrita a las fuerzas yemeníes se rindió y lo llevó ante el jeque de su tribu local para que lo llevara a salvo a casa.

Otros niños han sido coaccionados para cometer atrocidades contra sus compañeros reclutas, como apuñalarlos hasta la muerte.

El programa también comprende un protocolo de seguimiento de tres meses para garantizar que los chicos perdidos vuelvan a la escuela, así como un componente parental.

"Impartimos cursos para educar a los padres sobre la concienciación y las responsabilidades legales para proteger a sus hijos, para asegurarnos de que no acaban con luchadores y de que, una vez que se gradúen aquí, vuelvan a la escuela", explicó Mobarak.

'Ya no pueden asustarme'.

- Ahmed, ex niño soldado en Yemen

Los expertos del centro afirman que no preguntan a qué milicia o grupo militar fueron secuestrados los muchachos, pero se cree que la gran mayoría fueron secuestrados por las facciones Houthi, que controlan la capital, Saná, desde septiembre de 2014. En marzo de 2015, esto provocó que una coalición vecina liderada por Arabia Saudí interviniera con una mortífera campaña de bombardeos, sumiendo al país en un prolongado estado de guerra.

Y desde entonces, Naciones Unidas ha verificado más de 2.000 casos de reclutamiento de niños soldado. Se cree que al menos 6.000 menores siguen hoy combatiendo en ambos bandos, y los Houthis cargan con la mayor parte de la culpa por violar este aspecto del derecho internacional.

Fuera del centro, las marcas de las balas de mortero motean las paredes, y los cristales carbonizados rodean una prominente hondonada en la tierra. El centro de rehabilitación ha sido blanco de agentes desconocidos en tres ocasiones desde que empezó a funcionar hace once meses, y el asalto más reciente tuvo lugar la noche del 2 de mayo.

"Ya no pueden asustarme", añadió Ahmed. "No dejaré que me asusten más".

Carga más..