Según un nuevo informe de la Fundación para la Defensa de las Democracias (FDD), la emblemática Iniciativa china del Cinturón y la Ruta no ha cumplido los elevados objetivos iniciales de Pekín.
China celebró el décimo aniversario de la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI, por sus siglas en inglés), el ambicioso programa de infraestructuras de Pekín que pretendía enlazar los mercados emergentes y conectar Asia con Europa y otras partes del mundo.
El presidente Xi Jinping lanzó la BRI en 2013 como un impulso transformador para reproducir el impacto económico y político de la Ruta de la Seda, la antigua ruta comercial euroasiática durante más de 1.500 años. En cambio, el informe titulado"¿Ajustar el Cinturón o el Fin de la Ruta? China's BRI at 10", sostiene que la BRI ha causado estragos sociales, económicos y medioambientales. La corrupción masiva también ha generado una reacción política tanto contra China como contra los gobiernos que aceptaron el dinero de Pekín.
El informe examinaba estudios de casos en Ecuador, Zambia y la República Democrática del Congo, y lo que los autores descubrieron fue que la corrupción y el despilfarro proliferaban en la financiación del desarrollo por parte de China, mientras que la deuda contraída por los países participantes causaba grandes perjuicios.
La BRI pretendía abordar necesidades acuciantes liberando un billón de dólares en capital para infraestructuras en los mercados emergentes, y muchos de los proyectos inyectaron un impulso económico a las comunidades locales. En la práctica, la BRI no alcanzó los objetivos previstos.
"Desgraciadamente, los activos productivos se construyeron con una mano mientras que los proyectos de vanidad se construyeron con la otra, las malas proyecciones de costes y la planificación de riesgos contribuyeron a que las infraestructuras fueran innecesarias o de calidad inferior, y los préstamos opacos a tipos de mercado aumentaron las dificultades de endeudamiento de los países que menos podían permitírselo", declaró a Fox News Digital Josh Birenbaum, coautor del informe y subdirector del Centro del Poder Económico y Financiero del DDF.
Los críticos afirman que el Partido Comunista Chino tampoco es precisamente transparente sobre cómo gasta su dinero el programa. El informe señala que la opacidad burocrática hace mucho más difícil que los analistas independientes sepan cuándo fracasan los proyectos. Pekín también se muestra reacio a crear organismos de supervisión que garanticen eficazmente que el dinero se gasta bien.
EL EMBAJADOR DE EEUU EN CHINA NO "SE SIENTE OPTIMISTA" SOBRE LAS FUTURAS RELACIONES ENTRE LOS PAÍSES
"No hace falta mirar más allá del incumplimiento de la entrega de infraestructuras en la República Democrática del Congo a cambio de lucrativos derechos mineros de los que sigue disfrutando, o de la presa Coco Coda Sinclair de Ecuador, plagada de corrupción, construida al pie de un volcán activo y que sufre enormes grietas en sus cimientos", declaró a Fox News Digital Elaine Dezenski, directora senior y responsable del Centro sobre Poder Económico y Financiero de FDD.
Lo que les quedó a muchos países prestatarios fueron entidades chinas rapaces que se asociaron con funcionarios corruptos para promover sus propios y estrechos intereses, dando lugar a lo que el informe denomina proyectos de gran notoriedad y baja calidad que impresionaron al público nacional a corto plazo, pero que a menudo eran innecesarios, estaban mal pensados o se construyeron defectuosamente.
Los decepcionantes resultados de la BRI dañaron la reputación de las ambiciones chinas de mejorar su imagen en la escena mundial. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, único miembro del G-7 que suscribió la BRI, anunció que se retiraría de la histórica iniciativa de Xi. Dezenski afirmó que China aumentó su volumen de exportaciones a Italia, pero no ofreció las mismas oportunidades a las exportaciones italianas.
"Debemos aplaudir la medida de Italia de limitar la influencia coercitiva de la CCP en sus mercados, declaró Dezenski a Fox News Digital.
HAZ CLIC AQUÍ PARA OBTENER LA APLICACIÓN FOX NEWS
El informe recomienda que Estados Unidos y sus aliados deben tener una presencia más fuerte en las naciones en desarrollo para contrarrestar la creciente influencia de China, proporcionando apoyo directo e impulsando proyectos de valor estratégico. Estados Unidos puede hacerlo acelerando el trabajo de la Ley bipartidista BUILD, aprobada por el Congreso en 2019, que creó la Corporación Financiera de Desarrollo y permite al gobierno invertir en infraestructuras globales.
"En un contexto de opacidad, corrupción y deuda chinas, Estados Unidos y sus socios pueden construir una vía de inversión estratégica basada en la transparencia, la sostenibilidad económica y las asociaciones equitativas", concluye el informe.